sábado, 9 de mayo de 2015

Bodega Descalzos Viejos

Gracias al Privilegio Real de la reina Doña Juana I de Castilla, la Orden Trinitaria fundó en 1505 este Convento, en las faldas del Tajo. Dicho lugar que había sido una antigua ermita, se puso bajo la advocación de una imagen del Cristo de los Remedios, regalo de los Reyes Católicos.

Su relativo aislamiento respecto a la ciudad, llegó a ser una dificultad para la práctica a la que se dedicaba la orden, lo que motivó que, a finales del siglo XVI, se trasladaran a un edificio de Ronda, donde fundaron un nuevo Convento con el nombre de Los Remedios y el antiguo fue utilizado como “Casa de Recoletos”.

En 1608 se entregó el Convento del Tajo a la Orden Reformada de los Trinitarios Descalzos (nacida a finales del siglo XVI), haciéndose cargo del mismo el reformador de la Orden, Juan Bautista de la Concepción. Debido a numerosas dificultades, se hizo necesaria la intervención del Papa Clemente VIII. Los Descalzos permanecieron en este edificio hasta 1664, año en que se trasladaron más cerca de la ciudad, a la ermita del Santo Cristo de las Penas, actual Iglesia de Santa Cecilia.



Este traslado fue provocado por continuos problemas provocados por terremotos, corrimientos de tierras, caída de piedras, humedades, etc...
haciendo casi inhabitable el mismo; pese a ello, los Trinitarios más ancianos quedaron en el terreno a cargo de los huertos y frutales, de ahí surgió el nombre de Descalzos Viejos, denominación que la actual bodega ha recuperado.

El edificio del Tajo quedó durante mucho tiempo prácticamente abandonado, sometido a un lento proceso de degradación que, tras la Desamortización, lo llevó a utilizarse para diversas finalidades agrícolas, ganaderas, vivienda, etc.


En 1998, los actuales propietarios (las familias Retamero y Salesi) compran al concertista colombiano D. Rafael Puyana esta propiedad, e inician un proceso de restauración integral para convertirlo en sede de la bodega, contigua a los viñedos recién plantados en la zona baja de la finca.

El proyecto, ha supuesto la recuperación del edificio principal y sus jardines, huertos, estanques, fuentes y entorno, gracias a una exhaustiva y minuciosa restauración, reintegrando y consolidando todos los elementos arquitectónicos y artísticos originales susceptibles de ser recuperados. De especial interés, ha sido la aparición de unos frescos en el altar mayor, que bajo numerosas capas de cal, desconchones y humedades, han sobrevivido milagrosamente.

viernes, 1 de mayo de 2015

Fray Diego José de Cádiz

Fray Diego José de Cádiz o Beato Diego José de Cádiz (nació en Cádiz el 30 de marzo de 1743 y murió en Ronda, Málaga el 24 de marzo de 1801).
José Francisco se impuso esta triple meta: capuchino, misionero y santo. Fue admitido al noviciado de los Hermanos Menores Capuchinos de Sevilla, donde profesó el 31 de marzo de 1759. Siguiendo la costumbre de los misioneros capuchinos de cambiar el nombre al terminar el noviciado y reemplazar su apellido con el de su pueblo natal, tomó el nombre de Diego José de Cádiz con el que fue conocido posteriormente. Los capuchinos, caracterizados por su luenga barba, se consideraban a sí mismos como la rama más espiritual de la familia franciscana y al mismo tiempo como "los frailes del pueblo".

La plaza fray Diego Jose de Cadiz se encuentra ubicada en el corazón del casco histórico rondeño. En ella podemos encontrarnos con el Santuario de la Virgen de la Paz, patrona de Ronda; el colegio del Sagrado Corazón, regido por la congregación de las Esclavas y que fue fundado por el beato Marcelo Spínola allá por el año 1.893 y frente al santuario está la casa propiedad de la familia Álvarez/Cascos, en cuyo interior, en un modesto aposento, entregó su alma a Dios Fray Diego José de Cádiz.
En la ciudad de Ronda se conservan los restos de un antiguo acueducto a que popularmente se le llama "el predicatorio" ya que el "saber popular" nos dice que desde allí se dirigia a los rondeños transmiténdoles su fe y confianza en la providencia divina.
Los restos de este incansable apóstol de "La Baja Andalucía" reposan para siempre en una magnífica urna de plata que sufragara para tal fin la Real Maestranza de Caballería de Ronda, de la que fue Capellán.. Dicha urna se sitúa a los pies de "su Virgen" en el propio camarín y cuando la Alcaldesa lo abandona con motivo de sus salidas procesionales, el infatigable capuchino siempre la precede en humilde anda muy del carisma franciscano.

viernes, 24 de abril de 2015

El único molino del Tajo

Es el único molino que continúa en pie de la quincena de molinos que en su día operaban en el fondo del Tajo. Y desde hace meses, es además un lugar idílico donde poder descansar, a los pies del gran Puente: un albergue con vistas únicas a la gran depresión de Ronda.

El que ha venido en llamarse Albergue ‘Los Molinos’ ocupa una de esas antiguas instalaciones que aprovechaban a principios del siglo pasado la fuerza del agua para distintas actividades. En este caso concreto, sus actuales responsables recuerdan que figuraba ‘Fábrica de Fideos’ en un cartel de cerámica, que hasta hace años estuvo en su puerta, en colores amarillo y azul, pero cuyo paradero se desconoce. Una fotografía de 1918 que cuelga en las paredes del gran salón del establecimiento ya la construcción estaba levantada: “Desconocemos el momento exacto en que se construyó este molino, pero sí sabemos que era uno de los mayores de toda esta zona”, cuenta Ángela Bernal, la gerente del establecimiento, al tiempo que subraya la importancia de que sea el único que sigue en pie.

En el fondo del Tajo se contaban hasta 14 molinos; tres de ellos se empezaron a restaurar en 2007 a través de una escuela taller que dejó acabado sólo el actual albergue. Los otros dos, en una zona más baja del río, están a medio terminar. Y el resto, en zonas más altas y cercanas al Puente, están en algunos casos totalmente derruidos o en total abandono, si no bajo las piedras: “En 1919, un año después de tomarse la fotografía en la que se ven los muchos molinos que había en el fondo del Tajo, hubo un desprendimiento de rocas que enterró varios de ellos”, cuenta la gerente, al tiempo que enseña una enorme piedra situada en una de la esquinas del actual albergue: “Tuvo que caer con el desprendimiento. No se entiende si no que construyeran el molino con esa enorme roca ahí”, explica.

La fuerza del agua en los saltos del fondo del Tajo explica la historia de este lugar, con la compañía Sevillana como protagonista. Fue esta empresa la que acabó comprando todos los molinos para garantizarse el monopolio de la zona, de manera que acabó parando la actividad en todos ellos, “e incluso derribó sus tejados” para evitar cualquier competencia futura, de manera que toda el agua acabara llegando a la central hidroeléctrica de la zona más baja del río en este tramo concreto. 

La compañía acabó después cediendo los terrenos y las instalaciones a una asociación sin ánimo de lucro que autorizó en su momento la intervención del Ayuntamiento para que las escuelas taller pudieran realizar los trabajos, y ha decidido permitir la gestión turística del molino que pudo recuperarse en su totalidad. Hace tres meses, abrió sus puertas: “En 2007 acabó la reforma, y hasta ahora nada se había hecho en el molino. Hemos tenido que limpiar, reparar y ponerlo todo a punto, pero estamos muy satisfechos con el trabajo”. 

Una familia ha convertido ahora este molino en su medio de vida, como ocurrió antaño. Los productos del campo han dejado paso al turismo, y es por ello que la construcción dispone de una gran zona común que ocupa toda la planta del edificio, habiéndose acomodado en una segunda planta ganada al edificio unas habitaciones con capacidad para una treintena de personas y hasta dos baños comunitarios: “Hay distintas habitaciones y se ha ganado capacidad con unos altillos que todo el mundo que viene elige para dormir”. Las habitaciones tienen literas para ganar espacio; los baños tienen cabinas separadas “para que exista cierta intimidad”. Desde una de esas habitaciones se ve el Puente Nuevo: “La llamamos la suite”, bromea. Otra de las estancias ofrece una vista inmejorable del Asa de la Caldera: “En Ronda estamos totalmente acostumbrados a verla, pero quienes vienen se maravillan con su impresionante forma”, advierte la gerente.

Durante meses, la familia pintó el edificio; cosió incluso las cortinas o las fundas para los edredones nórdicos de las camas. Viven en el propio molino.
Los clientes del albergue son de perfiles muy diversos: “Llegan desde todos los lugares del mundo; y no tienen un perfil económico concreto, sino más bien un perfil de gente que es amante de la naturaleza y prefiere elegir cuando viene a Ronda un lugar privilegiado como éste”, cuenta Ángela.
Al fin, invita a los rondeños a conocer la instalación: “Podemos organizar eventos de grupo, y servimos cada día café y, si se solicita, también comida, a través de un cátering que tenemos contratado”.
Maderas; chimenea; y fotografías de los viejos molinos que cuelgan en las paredes. En el lugar se respira mucha historia.

domingo, 19 de abril de 2015

Setenil de las Bodegas

Setenil de las Bodegas es un municipio español de la provincia de Cádiz, Andalucía , pertenece a la Ruta de los Pueblos Blancos. El municipio se ve atravesado por el río Guadalporcún que forma el impresionante tajo a su paso por la ciudad.
La conquista de la villa era fundamental para la corona en su avance hacia Granada.
Desde los tiempos de Juan II de Castilla hasta el reinado de los Reyes Católicos se producirán siete sitios, de ahí el nombre de la ciudad Septem nihil, siendo el último –21 de septiembre de 1484– el que conduce a la victoria.

lunes, 6 de abril de 2015

Júzcar, el pueblo pitufo

Júzcar es un municipio español de la provincia de Málaga, Andalucía, situado al oeste de la provincia en el Valle del Genal, siendo una de la poblaciones que conforman la comarca de la Serranía de Ronda.
Situado a 623 metros sobre el nivel del mar, su población es de 221 habitantes.
Como el resto de los núcleos de la Serranía de Ronda, también se vio afectado por la expulsión de los moriscos y las consiguientes repoblaciones, donde halla sus raíces la población actual.
La primera fábrica de hojalata de España ,comenzó a producir a mediados del año 1731 ,reinando los siempre invictos monarcas y Católicos Reyes don Felipe V y doña Isabel de Farnesio"

miércoles, 1 de abril de 2015

Semana Santa en Ronda

La Semana Santa en Ronda, declarada de Interés Turístico Andaluz.
La semana  abarca desde el Domingo de Ramos hasta el siguiente domingo que es el Domingo de Resurrección, procesionando, salvo el Martes Santo y el Sábado Santo, imágenes representando la Pasión de Cristo sumando en su totalidad (la semana) hasta 15 desfiles procesionales realizados por 14 hermandades.
Los orígenes de la Semana Santa de Ronda se remontan a la conquista de la Ciudad por los Reyes Católicos.
Cuentan que Miguel de Cervantes frecuentaba a finales del Siglo XVI la Ciudad procedente de Sevilla para cobrar los tributos, en su cargo de alcabalero del Rey. Cervantes tuvo la oportunidad de conocer varias Hermandades rondeñas como la del Santo Entierro o la de la Vera Cruz.
Y hoy Miércoles Santo a disfrutar de:
Hermandad de "La Columna": Hermandad de Nuestro Padre Jesús en la Columna y María Santísima de la Esperanza (dos tronos).
Hermandad del "Cristo de la Sangre": Hermandad Sacramental del Santísimo Cristo de la Sangre y Nuestra Señora del Mayor Dolor (un trono).

miércoles, 25 de marzo de 2015

Pedro Romero

El conocido como Pedro Romero, de oficio carpintero como su padre y su abuelo, arranca desde niño acompañando a aquél en eso de enfrentarse a los toros. Ya por el año de 1.771, cuando sólo tenía 17 años, toreó por primera vez en Jerez de la Frontera.
Pedro Romero Martínez nació en Ronda en noviembre de 1.754 y murió en la misma ciudad el día 10 de febrero de 1.839. Su padre ,Juan Romero había nacido en Ronda el día 8 de Marzo de 1.727 y tuvo cuatro hijos toreros, el mayor Gaspar, el segundo Pedro, el tercero Antonio y finalmente el cuarto y más pequeño Pepe. Todos ellos fueron toreros como su padre y su abuelo, al que se le atribuye haber sido el iniciador de la tarea de matar toros a pie.